Como hablamos en el anterior post opositar es muy duro y conlleva un gran esfuerzo e implicación por parte de la persona que se está preparando. Para ello es importante:

Elegir una buena técnica de estudio. Se deben utilizar diversas técnicas de estudio para memorizar con más facilidad algunos datos, mediante esquemas, resúmenes o incluso reglas mnemotécnicas. Es muy importante que todo lo que estudiemos lo entendamos, ya que en un examen tipo test algunas preguntas podrían venir con trampa.

Rodéate de otros opositores. Las horas de soledad pueden hacer que te desmotives, por ello te recomendamos que intentes rodearte de otros opositores  ya que al estar en la misma situación os podréis apoyar unos en otros.

Cuídate. Preparar una oposición conlleva un gran esfuerzo  y tu cuerpo y mente deben estar preparados 100%. Intenta sacar tiempo para hacer algo que te guste y así tu mente desconectará y te motivará a seguir haciéndolo.

Constancia. Es el más importante, pero uno de los más difíciles.  De nada sirve hacerlo los últimos meses ya que es muy difícil que puedas  asimilar toda la información que conlleva el temario de las oposiciones.

Confía en ti. Es duro, se necesita paciencia y sobre todo es importante que no nos desmotivemos. Confía en ti, serás capaz ya que todo esfuerzo, ¡acaba teniendo una gran recompensa!